La desheredada : 2-07

23/10/2009 3.676 Palabras

La desheredadaSegunda ParteCapítulo VIIFlamenca Cytherea de Benito Pérez Galdós La unión nefanda de estos dos vocablos, bárbaro el uno, helénico el otro, merece la execración universal; pero no importa. Adelante. Contraviniendo la voluntad y las amonestaciones claras del Excmo. Sr. (tenía la Gran Cruz) D. Alejandro Sánchez Botín, Isidora fue a la pradera de San Isidro, acompañada de su doncella, de Riquín, de D. José de Relimpio y de Mariano. La prisionera del Sátiro no podía resistir ya el anhelo de expansión, de correr libremente, de ser dueña de sí misma un día entero, y, principalmente de darse el gusto de la desobediencia. Haciéndole rabiar gozaba más que divirtiéndose ella. Ya se aplacaría el tirano, pronunciando un par de buenos sermones, y si no se aplacaba, mejor. Estaba cansada de tan grande y molesto estafermo, y bien podía suceder que no haciendo caso de sus insufribles exigencias llegase a dominarle y someterle. Para fundar este imperio...

This website uses its own and third-party cookies in order to obtain statistical information based on the navigation data of our visitors. If you continue browsing, the acceptance of its use will be assumed, and in case of not accepting its installation you should visit the information section, where we explain how to remove or deny them.
OK | More info