La diosa del bosque

27/06/2013 451 Palabras

La diosa del bosque de Manuel María de Arjona   ¡Oh si bajo estos árboles frondosos se mostrase la célica hermosura que vi algún día de inmortal dulzura          este bosque bañar!.   Del cielo tu benéfico descenso sin duda ha sido, lúcida belleza; deja, pues, diosa, que mi grato incienso          arda sobre tu altar.   Que no es amor mi tímido alborozo, y me acobarda el rígido escarmiento que ¡oh Piritoo! condenó su intento,          y tu intento, Ixión.   Lejos de mi sacrílega osadía; bástame que con plácido semblante aceptes, diosa, en tus altares, pía,          mi ardiente adoración.   Mi adoración y el cántico de gloria que de mí el Pindo atónito ya espera; baja tú a oírme de la sacra...

Este sitio web utiliza cookies, propias y de terceros con la finalidad de obtener información estadística en base a los datos de navegación. Si continúa navegando, se entiende que acepta su uso y en caso de no aceptar su instalación deberá visitar el apartado de información, donde le explicamos la forma de eliminarlas o rechazarlas.
Aceptar | Más información