Historia Los orígenes del anarcosindicalismo radican en la oposición entre los socialistas marxistas y los anarquistas dentro de la I Internacional, que desembocó en la salida de ella de los segundos (Congreso de La Haya, 1872). Los anarquistas se situaron entonces al margen de los sindicatos obreros, predicando y practicando la lucha directa contra el Estado y la burguesía por medio del terrorismo. Esto justificó que los Gobiernos promulgaran duras leyes de represión contra el movimiento obrero. Los anarquistas procuraron entonces encuadrarse en los sindicatos con el fin de impulsar la acción reivindicativa de éstos hacia niveles revolucionarios y a la vez para arrancar de la masa obrera toda confianza en la actividad parlamentaria dentro del sistema político burgués.