azteca (calendario), de origen marcadamente religioso, funcionaba simultáneamente como divisoria del tiempo y homenaje cotidiano a los dioses. El mes azteca era de 20 días. Cada día tenía un significado particular (viento, casa, monstruo acuático, etc.) y llevaba un número de orden, tomado de una serie de 13. El mismo signo volvía a coincidir con la misma cifra al cabo de 260 días (20 ? 13). Es el año divino, Tonalpohualli, escrito en el tonalamatl o libro sagrado. Los años se identificaban según cuatro signos: acatl (caña), tecpatl (cuchillo de sacrificio), calli (casa) y tochtli (conejo), al tiempo que se ordenaban en una serie de trece. El mismo signo y la misma cifra se repetían al cabo de 52 años (4 ? 13), el siglo...