(Cultismo acuñado por su inventor, del griego dýnamis, 'fuerza'.) Explosivo inventado por Alfred Nobel en 1867, compuesto por un 75 % de nitroglicerina, un 24,5 % de kieselguhr (tierra de infusorios) y un 0,5 % de sosa, con una seguridad de manejo prácticamente absoluta —gracias a que la nitroglicerina está absorbida por un cuerpo poroso, el cual evita los riesgos de su manejo y transporte— y una muy alta fuerza explosiva. Actualmente el kieselguhr se sustituye por una mezcla de salitre y serrín o polvo de carbón, que participan en la explosión y aumentan el efecto explosivo. Además, la nitroglicerina se gelatiniza con lana de colodión. Alfred Nobel utilizó tierra de infusorios como absorbente, y en 1875 algodón pólvora; a la mezcla se suele añadir nitrato potásico, nitrato sódico y serrín de madera. La dinamita de base activa es aquella cuyo absorbente es explosivo o combustible: carbón, serrín, nitrato sódico, etc. La dinamita de base inerte es...