El estudiante de Salamanca - Parte segundade José de Espronceda ... Except the hollow seas.Mourns oer the beauty of the Cyclades.Byron.- Don Juan, canto 4. LXXII.& 160;& 160;& 160;Está la noche ...
La corona de fuego o los subterráneos de las torres de Altamirade José Pastor de la Roca Cuarta parte& 160;: Intrigas, amores y proyectosCapítulo I - AntecedentesHa trascurrido algún tiempo desde los ...
Brenda& 160;: 14& 171;La madr& 233;pora& 187;de Eduardo Acevedo Díaz En las primeras horas de una noche tormentosa, un morador situado cerca de la punta de Piedras Negras, que se dibuja al norte de ...
Capítulo II& 160;02Pág. 02 de 07Dulce sueñoEmilia Pardo Bazán Lina - I -¡Como una bomba, el notición Cuando traen el telegrama, estoy aseando mi cuartito, porque mi única sirviente apenas sabe pasar ...
Gerona& 160;: 22de Benito Pérez Galdós & 191;D& 243;nde buscaremos a Siseta? & 191;D& 243;nde?... Siseta, grit& 225;bamos por todos lados, en las ruinas, en la puerta de las casas enteras, en las ...
FREUD Y SU ENTORNOPOLITICA Y SOCIEDADCIENCIA Y PENSAMIENTOARTES Y LETRAS1856Nace en Freiberg (Moravia), el 6 de mayo.Hermann Helmholtz: Manual de óptica fisiológica.Paz de París (guerra de Crimea). ...
Juan Martín El Empecinado& 160;: 29de Benito Pérez Galdós Senteme en una piedra junto al r& 237;o y pens& 233; en Dios. Al punto vino a mi memoria la Caleta de C& 225;diz y mi habilidad natatoria. ...
Capítulo VIII& 160;08Pág. 08 de 21La altísima- Primera parteFelipe Trigo-¿Se ofrece algo, don Víctor?-Nada, Napoleón.-Aquí ando, por si acaso. Mi señora está por la señorita. Ha venido usted más ...
Capítulo I& 160;14Pág. 14 de 21La altísima- Tercera parteFelipe TrigoLa altísimaLa noche de las grandes impaciencias del gran siguiente día en que la perdida hechicera vendría á brindarle en nombre ...
nonePág. 034 de 127La lucha por la vida III Primera partePío BarojaLos sábados invariablemente, por las mañanas, debajo del balcón endonde trabajaba la Salvadora, solía ponerse un ciego a cantar, ...
La Montálvez-Parte II: Capítulo XVde José María de Pereda Desde que la Marquesa de Montálvez era juiciosa y administraba sus caudales por sí misma, tenía un regaladísimo placer en encerrarse en su ...
Cinco semanas en globo: Capítulo XXXVde Julio Verne La historia de Joe. - La isla de los biddiomahs. - Laadoración. - La isla sumergida. - Las orillas del lago. -El árbol de las serpientes. - Viaje a ...
El escándaloLibro I - Fabián Condede Pedro Antonio de Alarcón1875 Parte I. La opinión públicaEl lunes de Carnestolendas de 1861 -precisamente a la hora en que Madrid era un infierno de más o menos ...
Los MiserablesQuinta parte: "Jean Valjean"Libro tercero: "Javert desorientado"Capítulo I: Javert comete una infracciónde Víctor Hugo Javert se alejó lentamente de la calle del Hombre Armado.Caminaba ...
Trafalgar& 160;: 13de Benito Pérez Galdós La lancha se dirigi& 243;... & 191;a d& 243;nde? Ni el mismo Marcial sab& 237;a a d& 243;nde nos dirig& 237;amos. La obscuridad era tan fuerte, que perdimos ...
Entre naranjosde Vicente Blasco Ibáñez Segunda ParteV–Pero, beb& 233;, & 191;cu& 225;ndo llegamos a la isla?... Me fatiga estar en este banco lejos de ti, viendo esos bracitos m& 237;os c& 243;mo se ...
Memorias de un cortesano de 1815& 160;: 14de Benito Pérez Galdós Dirigime a casa de las se& 241;oras de Porre& 241;o, y hall& 233; a do& 241;a Mar& 237;a de la Paz muy gozosa por el buen giro y ...
Crimen y castigo Segunda Parte: Capítulo Ide Fiódor Dostoyevski Raskolnikof permaneció largo tiempo acostado. A veces, salía a medias de su letargo y se percataba de que la noche estaba muy avanzada ...
De invierno (Carriego)de Evaristo Carriego Frío y viento. Ya en la casa miserable, tiritando se durmió la viejecita, y en la pieza, abandonada como siempre, gime y tose, sin alivio, la enfermita. ¡Oh ...
Gerona& 160;: 8de Benito Pérez Galdós Yo estaba en Santa Luc& 237;a, donde hab& 237;a mucha tropa y paisanos. All& 237; me encontr& 233; a D. Pablo Nomdedeu, que me dijo: -Andr& 233;s, mis funciones ...
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